jueves, 23 de abril de 2009

Jordi, Miguel, William y Miles

Hoy se festeja en Catalunya el día de Sant Jordi. ¿Y esto qué ee? (así, sin la S y dos EE). Lo mismo me pregunto yo cada año que tengo que pasar este día. 
El tema es así. Sant Jordi es el patrono de Catalunya y de varios países, entre ellos Inglaterra, Bulgaria y Portugal. Cuenta la leyenda que en la región de Capadocia había un dragón que liquidaba a cuanto ser humano se le ocurra. Para que esto no siga ocurriendo, el pueblo decide entregarle un lugareño al azar por día, porque había demasiados muertos cada jornada. Hasta que le tocó a la princesa, quien se ofreció voluntariamente la muy pelotuda cuando por su posición podría haberse salvado. La estaba a punto de matar y apareció Jorgito (no el alfajor) clavándole la espada en el corazón matando de ese modo al dragón, salvando así a la reina y a todo el pueblo. De la sangre que salió del dragón nació una rosa. ¿Romántico? No, un asesinato cruel y despiadado. 
Entonces a los vendedores de flores (como el negocio iba mal) se les ocurrió que en este día los hombres deberían regalar una rosa roja a sus enamoradas, con el paso del tiempo también, enamorados.

Otra cosa que se conmemora hoy es el día del libro, ¿por qué? Porque este día murió William Shakespeare y fue enterrado (lo cual no muerto, murió el 22 de abril) Miguel de Cervantes Saavedra. El escritor del Don Quijote de la Mancha, ese libro que no vas a leer en tu puta vida. ¿Qué idea tienen las editoriales?, si los hombres dan una rosa, que las mujeres den un libro. Ponemos unos stands en todo el centro de Barcelona y que los enamorados compren, donde compra uno el otro está obligado. ¡Negoción! 

Entonces vas caminando por el centro y están todos los boludos caminando en una marea de gente entre los stands de los libreros y los puestos de las rosas, de un lado para el otro, cansados y cagados de calor (muchos con el menor interés en la literatura y menos en la flora). Lo bueno, dicen algunos, es que varios autores firman sus libros, entonces tenés colas de más de una cuadra para que Carlos Ruiz Zafón o Javier Marías te metan un mamarracho innentendible en las primeras páginas.  

Yo llegué a un arreglo con mi novia (que por desgracia le gustan éstas cosas). Un disco en lugar de un libro y  una maceta para el balcón en lugar de una rosa. 
Las excusas son en definitiva, las explicaciones de un festejo. Comida, bebida, regalos, intercambios. Recién cuando aparecen estos factores es que la festividad resalta. Yo prefiero San Patricio (y no por lo santo justamente) o el Oktoberfest, al cual nunca he ido. 
Crearía uno más, el día de San Gino, las mujeres nos dan un Gin Tonic y nosotros a ellas vino, y todos para atrás y contentitos.  

Como me recordó mi amigo Guerra, ayer 22 de abril, fueron 50 años del final de grabación de "Kind Of Blue" de Miles Davis. Según él y la crítica en general, uno de los discos más influyentes del siglo XX y, según otros, la biblia del jazz. Justamente es uno de los pocos discos de jazz que tengo, y no bajado de internet. Me debo más a esta música.
El disco original tiene 5 tracks así que... 
"Kind Of Blue" (1959) de Miles Davis.
#1  So What
#2  Freddie Freeloader
#3  Blue In Green
#4  All Blues
#5  Flamenco Sketches
Entre otros tocan grandes como John Coltrane en saxo tenor, Bill Evans en piano y "Cannonball" Adderley en saxo alto. Un dream team musical absoluto.

www.tresdeagosto.com

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