lunes, 13 de abril de 2009

Antes y ahora

Que fácil lo tienen ahora para enganchar una mina. Antes era todo un tema. Compañera de clase, o de solo verla en el colegio o universidad. También en el trabajo, aunque menos, porque sabías que esto tarde o temprano, te podía dar problemas. Te quedaba el boliche. Como mucho el bar.
El alcohol necesario para hacer frente y tirás los galgos al ataque. Después de un arduo, creativo e intenso discurso en los que tenías que estar al 100 % de tus capacidades, recién ahí, le sacabas algún dato, un beso ya era la gloria. Muchas veces a pesar de haber hecho el trabajo perfecto, el histeriquismo era más poderoso para la mujer y te quedabas en pelotas, revoloteando como un buitre por toda la disco en busca de carroña.
Tenías el teléfono y el dilema de cuando llamarla. Si la apurabas la cagabas, si tardabas la perdías. Llamabas y no había mucho tiempo para pensar, el típico cuestionario de rutina hasta que el timbre de tu voz cambiaba y se hacía más suave. Nos vemos mañana, preguntabas, y la respuesta tardaba una hora en llegar, a pesar de que fue en un segundo.
Te encontrabas en el lugar convenido y como no había móvil, a rezar para que aparezca. Tardaba tanto que dudabas de si era la dirección correcta, o si le habría pasado algo, o si se había arrepentido. Después es más o menos como ahora, excepto que daban el triple de vueltas que hoy día ya sea para echarte un polvo o simplemente para robar unos besos.

Ahora tienen internet, messenger, las redes sociales tipo facebook, móviles con sus sms, las pibas no se cortan un pelo, menos prejuicios. Lo bueno de todo eso, tanto para pibes como para pibas, es que te permite pensar. Elaborar el plan con estrategia, prácticamente nada queda resuelto a la improvisación, exceptuando cuando estás por consumar algo importante. Mandás un mensaje o mail, ya pensado y producido. Ella lo recibe, medita y te responde. Ningún momento de tensión, de trabarte con las palabras en la boca, ni tartamudear. Menos, ponerte colorado ante la negativa, un poco por la vergüenza que provoca el rechazo, otra por la calentura y enojo, sobre todo si te hizo llegar hasta ese momento y de pronto no quiere nada.
Además del boliche o disco, tiene el facebook o msn, en donde además se pueden ver las caras en algunos casos, sin haberse conocido. Lo que también te da tiempo para digerirla/o visualmente con más tiempo. 

Sin embargo lo de antes tenía un gusto a sufrimiento que ahora debe haber desaparecido, y que también tenía lo suyo. Ese nervio previo al primer llamado, a ver quien te atendía y de que modo. Si las tres veces que llamabas nunca estaba, mal síntoma. Pero la esperanza te decía que hasta que no te atendiera habría que insistir. Una cagada, porque estaba claro que no quería nada de nada. La estupidez eso si ahora, es igual o mayor que antes, y eso que tienen tiempo para pensar.  

Cinco tracks de "Riot City Blues" (2006) de Primal Scream.
#3  Suicide Sally & Johnny Guitar
#5  Little Death (muy Doors)
#7  We're Gonna Boogie
#8  Dolls
#9  Hell's Comin' Down
Si hay un grupo que cambio de estilo y de orientación musical muchas veces fue este. El disco muy yanqui en algunos momentos. Así y todo no lo caga, dándole power en varios tramos.

www.tresdeagosto.com

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