Ciertos catalanes y el mundial

Ayer mirando resumenes del mundial en Gol Televisión, uno de sus periodistas realiza un bloque donde muestra la otra cara del acontecimiento, la de los que no gusta este torneo. Salía en este caso por la ciudad de Barcelona, más específicamente el mercado de La Boquería, preguntando a señoras entradas en años, señores también y otros más jóvenes, sobre si seguían el mundial. La respuesta fue negativa casi en un cien por ciento.

Las personas generalmente eran mayores, mujeres. Y los más jóvenes también mujeres en su mayoría. A todo esto sumarle que realizó la pésima encuesta en Barcelona, en un mercado. Lo que se dice buscar el conflicto donde se sabe lo va a encontrar, ir a lo seguro para justificar su bloque y posiblemente su sueldo.

De ir a un mercado en Sevilla o Madrid la cosa hubiera ido a la mitad posiblemente. A las mujeres se sabe poco les importa el fútbol, pero en el mundial suelen interesarse algo, sobre todo gracias al tema de la banderita. Sumarle además a la nota, el contexto en el que fue realizada.
Muchos catalanes que no se sienten representados por España y que por ende no quieren saber nada con la españolidad, en el fútbol solo sienten al Barça (en un torneo español por cierto).

Entonces se suele oír con frecuencia lo siguiente:
- A mi el mundial me da igual, no me interesa, mi mundial es la Champions.
Lo dicen con un dejo de envidia de no poder participar con algo que sienten propio, de falta de interés forzado por su nacionalismo catalán. Pero se olvidan del fútbol en si, de la escencia del juego. Como también de la simpatía que pueden provocar ciertos equipos amén de tener uno en la competición y teniéndolo también. En mi caso es Eslovaquia. Es las ganas de ver fútbol, a pesar de en este mundial todavía no haber aparecido como se espera.

Esto es más o menos como si yo por ser de Olimpo o del Espanyol, no me permitiera ver la Champions League porque no puedan participar mis equipos, y minimizara todo a "lo que me importa es el Torneo Apertura argentino o la Liga española". En un caso por ser de otro continente (además de muy humilde), el otro por falta de excelencia en el juego. Es diría, de cuadrado futbolístico.

Es verdad también que muchos de boca para afuera dirán una cosa y cuando llegan a casa se interesen por los partidos, sin necesidad de ver un Eslovenia - Argelia, por decir uno que hasta los que aman el juego se perderán.
Dejará de darles igual si en octavos se cruzan un Alemania - Inglaterra, o si su amado Messi juega los cuartos contra uno de estos. O si Brasil o Portugal se la pelean a España. O si Holanda por esas cosas del fútbol tiene que cruzarse con Italia. Ni que hablar de semifinales y final.
En definitiva ellos se lo pierden, tal vez sea que no les gusta tanto el fútbol. Solo los colores de su bandera. Todo es respetable claro, sin dejar de ser cierto que tan futboleros no son.
Está claro que no hablo de la señora catalana de sesenta años que vende pescado en La Boquería de Barcelona.

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